Templo prĆ³ximo al hotel |
Como habĆamos hecho en nuestro primer dĆa en el Ayana Resort, hoy lo Ćbamos a dedicar en su totalidad a disfrutar del Hanging Gardens Resort. La ruta del dĆa anterior entre Denpasar y Ubud habĆa sido interesante, pero no nos habĆa dejado demasiado tiempo para disfrutar de nuestro nuevo hotel.
Despertando en la habitaciĆ³n. |
Detalle floral que nos encontramos por la maƱana en la habitaciĆ³n. |
Preparandonos para empezar el dĆa. |
Al acabar el desayuno fuimos a la recepciĆ³n del hotel, para preguntar por unos cenas romĆ”nticas que habĆa visto el dĆa anterior. HabĆa varias, como una cena en la piscina, esta vez montaban todo encima de una plataforma, con mesa, sillas y demĆ”s y se cenaba allĆ a la luz de la luna.
Pero al final la que elegimos fue esta:
Secret Romantic Dinner (Cena RomĆ”ntica Secreta): salida del hotel hasta el lugar de la cena secreta romĆ”ntica, seguido de una paseo por la jungla hasta llegar al templo del agua sagrada. En este manantial sagrado, vive la experiencia del ritual de purificaciĆ³n por un mangku del lugar (sacerdote hindĆŗ), el cual dirigirĆ” las oraciones, seguido de un masaje en los pies en la terraza junto al rĆo en la parte baja del valle.
TambiĆ©n preguntamos por alguna actividad fuera del hotel, y la que mĆ”s nos convenciĆ³ fue la del paseo en Elefante, el cual, le hacia mucha ilusiĆ³n a Marcela, asĆ que reservamos uno para el Viernes, porque habĆamos quedado con el conductor del taxi en un tour por el norte para el dĆa siguiente, pasando por su pueblo natal, Amed.
Una vez hechas todas las reservas, decidimos bajar todo el valle hasta el rio y subir la otra ladera hasta el templo. Lo cierto es que pensamos que serĆa un paseo tranquilo, pero al final resulto bastante mĆ”s esforzado de lo que pensĆ”bamos, pues las laderas estaban mĆ”s empinadas de lo que creĆamos. Ademas hay que unir el fuerte sol y el calor, la humedad y que no llevĆ”bamos nada de agua, asĆ que pronto empezamos a sudar de lo lindo, pero al final y despuĆ©s de subir por la jungla, conseguimos llegar a la cima del templo.
El paseo, a pesar de todo, fue increĆble, casi como si se tratara de una aventura de Indiana Jones, atravesando rĆos, descubriendo templos ocultos en la floresta de la selva, estatuas escondidas detrĆ”s de enormes hojas, hasta llegar a la cima y al templo principal.
Desde lo alto las vistas eran sin par, pudimos ver todo el hotel y el valle desde el otro lado, casi igual de impresionante.
Curiosamente esta era la primera vez que conseguĆamos acceder a un templo en la isla.
Tanto el camino como el templo en sĆ, estaban totalmente vacĆos.
EstĆ”bamos en el mismo lugar donde tendrĆamos la cena esa misma noche, o al menos eso era lo que pensĆ”bamos en aquellos momentos.
Tanto el camino como el templo en sĆ, estaban totalmente vacĆos.
EstĆ”bamos en el mismo lugar donde tendrĆamos la cena esa misma noche, o al menos eso era lo que pensĆ”bamos en aquellos momentos.
Vistas del valle desde lo alto del templo. |
En la entrada del templo. |
Escaleras de entrada al templo. Al fondo al otro lado del valle el Hanging Gardens. |
Diferentes construcciones que encontramos en el templo. |
Un momento de meditaciĆ³n y tranquilidad. |
Dentro del templo. |
Bienvenidos al Dalem Segara Temple. |
DespuĆ©s de un montĆ³n de fotos y un buen y merecido descanso, empezamos el camino de vuelta al hotel, y la verdad es que la vuelta resulto ser mucho mĆ”s fĆ”cil que la ida.
Tras la excursiĆ³n llego el merecido descanso en la infiniti pool. IncreĆble la piscina, y si a ello se suma la sombra, las hamacas, agua fresca y una sidra, ya para terminar de complementarlo para tener una tarde idĆlica.
Infiniti pool del Hanging Gardens. |
Disfrutando de la piscina y de las vistas. |
Entre los dos niveles. |
El lugar era totalmente mĆ”gico, la piscina, las vistas, el templo, la jungla, el valle y Marcela descansando en el agua. ParecĆa no cansarme de tomar foto tras foto desde todos los posibles Ć”ngulos, no querĆa perderme ni el mĆ”s mĆnimo detalle para poder recordarlo todo perfectamente cuando dejĆ”ramos aquel paraĆso.
DespuƩs de unos largos en la piscina superior y otros en la inferior, jugar con las cascadas, asomarse al borde de la jungla y un par de sidras con patatas fritas, todo mezclado con un buen descanso en la tumbona, decidimos volver a la villa para poder disfrutar de nuestra piscina privada y prepararnos para la cena secreta romƔntica.
La tarde estuvo de sustos con nuestro material fotogrĆ”fico, pues tuvimos problemas con la cĆ”mara de Marcela y la mĆa, pero al final pudimos solventarlo satisfactoriamente.
A eso de las siete de la tarde llego el taxi para llevarnos al lugar de la cena. Fue un corto paseo de apenas diez minutos, justo hasta la entrada superior del templo en donde habĆamos estado esa misma maƱana. AllĆ, ya nos estaban esperando varios camareros. Nos explicaron como iba a ser toda la cena.
Primero comenzaron hablando sobre el templo, el cual para nuestra sorpresa tenĆa solo treinta aƱos de antigĆ¼edad, pues parecĆa mucho mĆ”s antiguo y fue construido por el Ćŗltimo rey de la comarca.
El templo estaba mucho mĆ”s impresionante de noche que de dĆa. HabĆan colocado velas bordeando las escaleras principales que daban acceso a Ć©l. AsĆ que ahora estĆ”bamos bajando estas, iluminados a la luz de la luna y de las velas. La verdad es que se nos puso la piel de gallina en esos momentos.
En la entrada del templo a la luz de las velas. |
Increible la decoraciĆ³n que habĆan montado y las vistas. |
Nos recibieron con unos zumos de lemongrass y un par de canapĆ©s gluten free. Deliciosos. DespuĆ©s el chef nos explico cual iba a ser el menĆŗ, que iba a cocinar allĆ mismo para nosotros. Todos los ingredientes estaban allĆ expuestos delante de nuestros ojos. Muchos con hielo para conservarse frescos, otros sobre hojas de arboles locales. Al lado de la mesa con estos habĆa una cocina portĆ”til donde iban a cocinar la cena.
Tomando un canapƩ con el cocktail. |
Tuvimos mƔs canapƩs como entrante, junto con una ensalada de rollos de vegetales y un sopa de marisco. Tomamos unos cocktails para acompaƱar los entrantes.
El plato principal consistĆa de pescado (Sniper Fish) con unos pinchos de ternera, pollo y cerdo, acompaƱados de arroz y vegetales, y para terminal un plato de mariscos preparados en una hojas de palma; todo ello regado con un vino blanco, un Jumilla de EspaƱa.
El postre fueron frutas variadas, con arroz negro, plƔtano frito y arroz pegajoso son coco.
Que puedo decir, todo estaba absolutamente delicioso, y se sentĆa bien frescos todos los alimentos. Y el trato que recibimos de camareros y chef fue exquisito, siempre atentos a cualquiera de nuestras necesidades o preguntas, incluso con las continuas fotos que les pedĆamos cuando llegaba cada nuevo plato.
DespuĆ©s de tomar un cafĆ© y una copa de Oporto, fuimos a nuestra primera ceremonia, que consistĆa en escribir un deseo, ponerlo dentro de una globo-lampara de papel y dejarlo subir a los cielos. Fue muy especial ver como las lamparas se perdĆan en la infinitud de la noche y de la luna.
Tras los deseos, volvimos a subir las escaleras del templo, dentro del cual ya nos estaba esperando el sacerdote para la ceremonia de purificaciĆ³n del agua. Esta fue un poco mĆ”s larga de lo que pensaba y constaba del sacerdote pronunciando a increĆble velocidad y, imagino que en algĆŗn tipo de lenguaje hindĆŗ, un montĆ³n de oraciones, que no pudimos comprender en absoluto.
Al final nos dieron agua para beber y para derramar sobre nuestras cabezas, asĆ como arroz pegajoso que se quedo pegado en nuestra frente.
Mientras esperƔbamos por el taxi para traernos de vuelta al hotel, estuvimos conversando con los camareros y el chef, que estaban tambiƩn esperando con todas las neveras y cocina portƔtiles para llevarlas de vuelta.
De vuelta al hotel nos estaban esperando en las instalaciones que tienen junto al rio, abajo del valle. AllĆ un par de masajistas del club de salud del hotel nos dieron un relajante masaje en los pies, todo eso con el tranquilo sonido del correr del rio, mientras que tomĆ”bamos un tĆ© de frutas que nos habĆan ofrecido al llegar.
Y asĆ, ya estĆ”bamos dispuestos para ir a dormir, ya era bastante avanzada la noche y no se oĆan nada mĆ”s que los sonidos de la jungla, que maravilloso dĆa en el Hanging Gardens Resort.
6 Comentarios
Muy bonito
ResponderEliminarGracias
EliminarMuy bonito
ResponderEliminarMuchas Gracias. Es un lugar maravilloso!
EliminarSĆŗper romĆ”ntico!❤️
ResponderEliminarGracias!
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